Este post va dedicado a mi gran aventurero Jonathan Antonio
Flores Amaiquena que ha decidido viajar casi 4.000 km para descubrirnos este
lejano y al parecer hermoso país.
Islandia es uno de los lugares geológicamente
más reciente de la tierra, y uno de los últimos en ser colonizados. Para que
nuestro querido compañero pueda entender a estos rubios pobladores daré unas
pinceladas a la historia de Islandia.
La fecha de los primeros asentamientos es
incierta, quizá los romanos, quizá los vikingos. Recordar que los vikingos
fueron un pueblo escandinavo de aventureros, armados con las naves más rápidas
de su tiempo, y obligados por la política del momento y una gran escasez de
alimentos en la península escandinava, a buscar fortuna en el extranjero a
través de la guerra y la privacidad.
De acuerdo con los antiguos manuscritos de
Íslendingabók (libro de los islandeses, siglo XIII) y del Landnámabók, el
primer poblador permanente de Islandia fue el noruego Ingólfur Arnarson. Según
estos manuscritos, Arnarson llegó a Islandia en el año 874 d.C., y dio a la
ciudad de Reykjavik (cuya traducción es “Bahía de los humos”) el nombre que aún
conserva. La bonanza de Arnarson en la isla atrajo a otros inmigrantes, que dedicaron
los siguientes sesenta años a ocupar y domesticar los terrenos vacantes, en lo
que se conoce como el Asentamiento o Landnám.
La mayoría de estos primeros
islandeses eran noruegos, si bien hubo muchos procedentes de Escocia, Irlanda,
el norte de Inglaterra, las islas Shetland, las Orcadas o las Faroe. La mayoría
de ellos eran agricultores, que trajeron con ellos sus ovejas, caballos y
cultivos como la cebada. Fueron estos colonos los que acabaron esquilmando los
bosques islandeses para poder disponer de combustible, y de material suficiente
para sus edificios y embarcaciones. Las condiciones en Islandia debieron ser
más favorables en comparación con las de Noruega, y ya en el año 930 se
colonizaban las últimas áreas del país, y vivían en él 60.000 personas
aproximadamente.
El primer siglo de vida de esta recién creada república fue en
gran medida su época dorada; el país se unió, los recursos naturales eran
abundantes y la agricultura, rentable. Esta época es la denominada era de las
sagas, el momento en el que las primeras generaciones de islandeses forjan los
grandes nombres que pasan a la tradición oral, y que sólo más tarde son
escritas en papel. Si los colonos eran predominantemente paganos y adoraban a
dioses nórdicos como Odín, Thor, Freyr o Freyja, en el siglo X las presiones
europeas hicieron que la mayoría se convirtiera al cristianismo, especialmente
a medida que el fin del milenio se aproximaba, momento en el que prominentes
islandeses aceptaron la nueva fe.
En un referéndum nacional, el noventa por ciento de los
votantes aprobaron la propuesta, y así en diciembre de 1918, Islandia pasa a
ser un Estado asociado a Dinamarca, con el reconocimiento como estado
independiente sin dejar de aceptar al rey danés como monarca. En 1944 Islandia
recupera su total independencia, y proclama la república, de la cual Sveinn
Björnsson pasa a ser el primer presidente.
Ya en 1915, se estableció en Islandia la igualdad de
derechos entre mujeres y hombres, obteniendo el derecho de voto y de
representatividad política. En junio 1980 Vigdís Finnbogadottir, es elegida
Presidenta de la república de Islandia, convirtiéndose en el primer país
europeo en el que una mujer gana unas elecciones presidenciales.
En Islandia hay aproximadamente 319.000 habitantes en una
superficie de 103.000 km2,siendo uno de los países menos poblados del mundo.
En la capital, Reykjavik, y sus alrededores se concentra más
de la mitad de la población de la isla. Akureyri, al Norte, es la segunda
ciudad más importante del país con 15.000 habitantes.
Islandia es uno de los países donde la esperanza de vida es
más alta, 83 años para las mujeres y 80 para los hombres. El nivel de vida
islandés es de los más elevados del mundo. Cerca del 80% de las exportaciones
dependen de los productos pesqueros o las industrias ligadas a la pesca.
La lengua oficial es el islandés, una lengua muy próxima a
la hablada por los primeros colonos hace ya más de mil años aunque
prácticamente todos los islandeses comprenden y hablan inglés.
¿Qué esconde Islandia?
En un primer lugar se
puede empezar relajándose con un baño en las aguas volcánicas del Blue Lagoon,
un balneario geotérmico cerca de la capital Reykjavik, famoso por las
propiedades medicinales de sus aguas, y por el impresionante espectáculo de sus
alrededores y el color del agua. Es impresindible darse un baño de barro que
cogemos del fondo del suelo y ponerselo en la cara con el fin de ponerse muy
muy muy guapo Jonathan.
La siguiente parada es Geysir, el pueblo que da nombre a los
geiseres. Y es que aquí se encuentra el geiser más antiguo conocido. Es un
espectáculo impresionante ver elevarse a tu espalda una columna de
aproximadamente 20 metros de agua hirviendo. Quiero fotos en primera persona de
esto Jojo.
En Gullfos podremos disfrutar de una cascada con unas vistas
impresionantes en las que podrás hacer unas fotos memorables y relajarte
mientras ves como cae el agua con toda su fuerza.
Para terminar un día de excursión vete a las afueras de la
ciudad, al monte para cazar auroras boreales, también quiero fotos de esto en
primera persona.
Ahora te toca a ti,Jonathan, descubrirnos los secretos que
quedan por conocer de esta isla.
Esperamos tener noticias muy pronto de tu aventura.
Buen viaje